De cara al día de Reyes, muchos padres se preguntan si es conveniente que sus hijos reciban dispositivos como un 'smartphone' o una consola de videojuegos. El psicólogo Valentín Martínez-Otero asegura que no deben darse móviles a niños menores de 10 años, pero para mayores de 12 puede ser frustrante no tenerlo. Rocío Ramos-Paúl, la conocida Supernanny, destaca los factores positivos de los videojuegos aunque recomienda el control de contenidos por parte de los padres.
Se acerca la noche más mágica del año, esa en la que los Reyes Magos recorren los cielos y, casa por casa, van depositando regalos para los niños buenos. Pero, aún con tiempo para escribir una carta de peticiones a sus majestades, los papis tienen muchas dudas. ¿Su pequeño tiene ya edad suficiente como para tener un teléfono móvil?, ¿una consola de videojuegos es un buen regalo?, ¿hasta qué punto son positivas o negativas las nuevas tecnologías para los menores?
No hay respuestas absolutas, todo tiene muchos matices y, por tanto, es preciso ser cauto. "Salvo casos justificados —por ejemplo, por razones de seguridad—, es preferible que no se regalen móviles por debajo de los 10 años", explica Valentín Martínez-Otero, doctor en Psicología y profesor de la facultad de Educación de la Universidad Complutense de Madrid. "En todo caso, si el niño dispone de un teléfono móvil debe utilizarlo con arreglo a unas normas claras, y siempre en un marco de uso responsable, discriminado y limitado, de lo contrario, el niño puede quedar enganchado al teléfono y utilizarlo incluso durante las clases. Además, el móvil debe ser sencillo", añade el psicólogo.
Sin embargo, la línea de conveniencia es difusa y cada vez se reduce más la edad en la que los niños desean tener un smartphone. "En nuestra sociedad, por encima de los 12, no tener móvil puede hacer que el menor se sienta discriminado por el grupo de compañeros o amigos", señala Martínez-Otero.
Si los padres optan finalmente por pedirle a los Reyes un teléfono para el niño, deben ser muy cautos. "Hay que tener cuidado, pues se sabe que los niños pueden utilizar los móviles para fines distintos al de la comunicación con sus padres: establecer relación privada con otros niños, a veces en un contexto desaconsejable de bromas y presiones; grabaciones inadecuadas; gastos excesivos; etcétera", asegura el experto, quien recomienda a los tutores "establecer horarios de uso para que el uso del móvil no interfiera con el descanso, la realización de deberes o las comidas".
Aunque no hay que caer en el alarmismo ya que, "junto a los riesgos, el uso adecuado de los móviles también puede ayudar en el despliegue de la autonomía y de la responsabilidad".
Uno de los grandes riesgos que conllevan los smartphones y otros dispositivos tecnológicos es el hecho de que constituyen una puerta de acceso a las redes sociales, herramientas que, si se usan de forma inadecuada, pueden ser fuente de peligros y problemas: invasión de la privacidad, ciberacoso, grooming (situaciones en las que ciertas personas intentan manipular al menor con el fin de abusar sexualmente de él), disminución del rendimiento escolar, adicción...
"Todas estas amenazas hacen necesaria una alfabetización digital dirigida tanto a los adolescentes como a sus padres y profesores", indica Martínez-Otero. Las mejores herramientas para combatir estos peligros son los mecanismos de filtrado de accesos y de bloqueo, las pautas educativas —"entre las que cabe citar la conexión desde un lugar de paso de la casa, para evitar el descontrol y el aislamiento"—, el establecimiento de horarios y, sobre todo, "el diálogo entre padres e hijos sobre las ventajas e inconvenientes de las redes sociales".
El potencial de los videojuegos
Las nuevas tecnologías ya eran el regalo estrella del día de Reyes mucho antes de la aparición de los smartphones. Durante décadas, las videoconsolas han estado entre los presentes más deseados por niños y no tan niños. Aún así, todavía hoy hay miles de padres que dudan a la hora de permitir que sus hijos jueguen a los videojuegos y, si lo hacen, no tienen siempre claro que tipo de juegos son los más convenientes para ellos.
Como casi cualquier producto, sus efectos dependen mucho del uso que se les dé. Martínez-Otero afirma que, "bien utilizados, los videojuegos ofrecen numerosas posibilidades: el desarrollo de la coordinación entre los ojos y la mano, la mejora de la aptitud espacial, la estimulación de la atención, la fantasía, la motivación, la toma de decisiones y el autocontrol, etcétera".
"No hay que olvidar tampoco que puede haber interacción durante el juego, lo cual permite comunicarse y estrechar relaciones", señala el psicólogo, quien coincide en este punto con Rocío Ramos-Paúl, la famosa Supernanny. La psicóloga recomienda a los padres de niños pequeños que se decanten por los videojuegos que permitan jugar en grupo. Además, es positivo jugar con ellos, tanto para pasar tiempo juntos como para controlar el contenido de los videojuegos.
"Si nuestros hijos asocian los videojuegos a momentos de dispersión y además tienen otras actividades de ocio, estaremos educando en la distribución de su tiempo libre sin que el videojuego interfiera en otras rutinas necesarias", explica Ramos-Paúl en suprimeraconsola.es. También señala muchos efectos positivos, como el desarrollo de la imaginación y la creatividad, la ejercitación de la memoria y la mejora de la autoestima.
Además, recuerda que, para evitar posibles problemas relacionados con los videojuegos, "prohibir su uso no es la mejor solución". Lo más importante es "definir las normas de uso y las consecuencias que se derivan de ellas", esto supone un primer paso para educar a los niños en el autocontrol. También es recomendable informarse bien sobre cada videojuego para evitar los contenidos inadecuados.
Aplicaciones para los más pequeños
Los niños se están convirtiendo cada vez más en usuarios habituales de smartphones y, en consecuencia, multitud de empresas desarrolladoras de software se han lanzado a la creación de apps específicas para ellos, desde pasatiempos educativos hasta cuentos, cuadernillos de matemáticas y juegos para preescolares.
Planeta Pirata: Esta app recopila más de cien minijuegos educativos para niños de entre 2 y 5 años: puzles, "recortables", pruebas de memoria, pasatiempos de observación y búsqueda de diferencias entre dos imágenes... Muy variado y divertido incluso para niños que ni siquiera han aprendido todavía a leer. Dispnible para iOS y Android (0,50 euros).
Babyradio: Aunque los preescolares no tienen móvil ni tableta, sus padres sí, y no es raro que se los presten —con mucho cuidado— a sus retoños para que jueguen con ellos. Esta app es ideal para esos confiados papis, un programa que ha desarrollado una startup gaditana pensando en que la usen niños de 1 a 6 años. Incluye cuentos, nanas, juegos musicales y vídeos para que los peques se vayan familiarizando con el inglés. Está disponible para iOS (gratuita con más contenidos para suscriptores).
iCuadernos: Muchos adultos recordarán entre la nostalgia y el horror los famosos cuadernillos Rubio de su infancia. Estos pequeños libros educativos no han desaparecido, han evolucionado. En el siglo XXI, se han convertido en una moderna aplicación que enseña matemáticas a los pequeños de una forma lúdica y sencilla (con posibilidad de crear un perfil, ganar medallas....). Además, contribuye al desarrollo intelectual y motriz de los más pequeños mediante una serie de dibujos para pintar y contornear. Está disponible para iOS y Android (gratuita).
Toca Doctor: Este juego de cuidadísimo diseño desarrollado por una compañía sueca anima a los niños a convertirse en jóvenes doctores que deben desinfectar heridas, aliviar irritaciones oculares o combatir los síntomas del resfriado, entre otras muchas dolencias que se presentan en forma de 21 divertidos e intuitivos puzles táctiles. Disponible para iOS (2,99 euros).
Pet Doctor: Los animalitos también necesitan cuidados. Con esta app, los peques pueden convertirse en prometedores veterinarios capaces de curar chichones a un pollito, desanudar a un gusano enredado y sanar la oreja herida de un gatito. Este colorido juego, que incluye 15 mascotas a las que cuidar, está pensado para niños de entre 2 y 6 años. Disponible para iOS y Android (2,99 euros).
Art of Glow: Una de las mejores aplicaciones infantiles de dibujo disponibles, llena de brillos, colores, animaciones e incluso fuegos artificiales. El lienzo es un fondo negro que simula un cielo nocturno y los niños pueden dibujar sobre él con pinturas que simulan ser estrellas y luces . Disponible para iOS y Android (gratuita).
PlayKids: Estrellas infantiles como Caillou o Peppa Pig triunfan en la televisión y ahora también en los dispositivos móviles. Esta aplicación ofrece horas de programas infantiles para los usuarios de pago, pero también multitud de contenidos gratuitos como canciones infantiles, dibujos para colorear y juegos educativos con un bonito diseño muy cuidado. Disponible para iOS y Android (gratuita con más contenidos para suscriptores).
Dismonsters: Esta original aplicación tiene el noble propósito de ayudar a los niños a perder el miedo a la oscuridad. Está planteada como una sucesión de juegos en los que los pequeños descubren que algunas monstruosas sombras pertenecen en realidad a objetos cotidianos. Disponible para iOS (2,69 euros).